Imaginar que soy una pieza de barro. Y
que soy capaz de crear un ser humano a partir de ella. Imaginar que
soy esa criatura surgida de la creatividad de mi/tu artista interior.
Explorar y descubrir la capacidad sensitiva y expresiva de mi propio
cuerpo. Y disfrutar.
Ayer en la sesión del GRUPO DE CONTRADANZA exploramos nuestra capacidad creativa y tomamos
conciencia de la responsabilidad sobre nuestra vida, de la que somos
autoras y actrices a la vez.
Porque somos creador@s de nuestras vidas, y por tanto responsables. No darnos cuenta de ello nos impide tomar la dirección que deseamos. Por el contrario, la conciencia nos permite movernos hacia nuestro verdadero destino, hacia el camino de desarrollo personal que nos hace sentir la felicidad.
